Monday, May 23, 2005

...

Te vi viéndome. Te descubrí descubriéndome.
Te vi mirando mis ojos, queriendo entrar en ellos. Descubriendo los matices de su iris. Reconocías mi cara, mis expresiones, estudiabas cuidadosamente todas mis facciones. Parecías querer grabar en piedra mi fisonomía. Haciendo un retrato mental de mi rostro.
Te vi mirando mi cuerpo. Tomándolo con tus ojos. Reclamando con ellos territorio, imaginando caminos y recorriéndolos con tu mirada. Tratando de conocer la historia de cada lunar, cicatriz, cada marca, cada surco... Paseándote por cada curvatura, por cada llanura... Queriendo llegar mas allá de la superficie, explorando cada recóndito milímetro, sintiendo con los dedos de tus ojos los latidos de cada espacio, rastreando cada paraje...

Te vi, mirándome.

Saturday, May 14, 2005

Pág. 34

Hoy comienzo a escribir una capitulo nuevo. Sobre un papel en blanco. Preparado especialmente para lo que voy a escribir allí. Un papel que permite la tinta correr suavemente, de textura muy suave para el roce de la mano y con la propiedad particular de guiar mi mano para que las líneas sean derechas. Un papel profundo pero ligero.
Cierro los capítulos anteriores, agradecida con la vida por todas las vivencias, por todos los momentos de amor intenso, por los corazones que me tocaron y aquellos que he tocado yo. Por mi familia maravillosa y por su amor infinito. Por los errores cometidos, y la oportunidad de aprender de ellos. Por los angeles que me han cuidado.
Satisfecha por las batallas conquistadas, por las guerras ganadas y por las perdidas, por todo lo que me toco aprender con ellas.
Llena de esperanza por lo que me falta. Con el propósito de dejar atrás tristezas, angustias, miedos y temores. Dispuesta a caminar con la frente en alto, la mirada limpia, retadora ante los caminos que se abran, con el corazón tranquilo y latiendo como Dios manda. Con la esperanza de caminar con el paso firme. Siempre con música en el corazón.
Con la certeza absoluta de que Dios guía mis pasos, que me acompaña en cada paso del camino y como todas las veces anteriores, es él quien me carga cuando el camino se vuelve demasiado rocoso para caminarlo...
Con el reto reafirmado de hacer de Isabel Cristina una niña plena, feliz, y sana. De entender, aprender y asumir que Isa rompe mil (998+2) patrones, diez mil quinientos (1250+250) esquemas y que todo esto es valido. De permitir que mi creatividad tome riendas en el asunto y consigamos nuevas maneras de entendernos y herramientas para aprender las cosas de otra manera. De seguir buscando la mejor manera de ayudarla y aplicarla. De darle mi amor inmenso para que se apoye en él, cuando su camino lo requiera. De pedirle a Dios que no permita que mi amor por ella se ciegue y no pueda ver yo donde más me necesita y como poder ayudarla. De aceptarla como es y amarla siempre así. De exigirle en la justa medida y motivarla para ser siempre mejor. De enseñarla a sentirse orgullosa por todos sus esfuerzos y feliz por ser una niña tan querida. De seguir compartiendo con ella la música. De enseñarla a vivir con la mirada siempre clara y esos ojos bellísimos alumbrando el siempre el camino.
Con la esperanza del amor que espero, del hombre que camine conmigo, que desde algún lugar camina en dirección mía.
Hoy comienzo mi Pág. 34.

Tuesday, May 10, 2005

Tristeza

Gracias a ti, tengo el corazón absolutamente poseído de un tristeza profundísima.
Tristeza por mí, por haber vivido tanto tiempo y tantas cosas contigo sin llegar a conocerte bien, y ahora que te conozco bien, tristeza por el tiempo perdido a tu lado.
Tristeza por amor mal gastado en ti, en quererte como te quise, en mirarte como te miraba.
Tristeza por lo que tu, mi amor del pasado, vives día a día. Solo puedo pensar que tu vida es tan miserable, que tu corazón tan chiquito y mezquino, que tan ruin tus pensamientos y tan oscuros tus sentimientos que te llevan a actuar como lo haces.
Tristeza por lo que quien te acompaña ahora en el camino debe vivir a tu lado.
Tristeza por mi hija, que algún día tendrá que enfrentar la realidad de tu vida innoble, mísera, triste e infame.
Tristeza por que no pensé que alguien como tu existiera.
Tristeza por que como mi amor fue autentico y mis años a tu lado entregados en nombre de ese amor, siempre serás un pedacito de mi vida.
Tristeza, por que lo que haces, no me lo haces a mí. Se lo haces a ella.
Y con todo lo condescendiente que esto puede sonar, le pido a Dios que te ayude, que te ilumine, que te bendiga... Que aclare tu corazón. Que puedas darle a quien te acompaña en el camino el amor que ella sueña, el hombre que la acompañe en sus sueños, que camine de su mano.
Que suavice tus orillas para que cuando mi chiquita te toque no se haga daño.
Que guíe tus pasos para que algún día consigas paz para tu alma.Que no sientas nunca una tristeza como esta.

Thursday, May 05, 2005

Ya es hora

Fui buscándote, con muchas ganas de verte.
Con ganas de ver tus ojos siempre transparentes para mí, una vez mas después de tanto tiempo.
En los años te vi una vez. Sereno, tranquilo, con tu caminar cansado, pesado, firme, caracteristico. Me dio pánico verte. En aquel aeropuerto punto de partida, encuentro y llegada para mas de 88,775 pasajeros diariamente. En aquel tumulto te reconocí en el acto. Me dio pánico verte. No conseguí las fuerzas para llamarte, el miedo de verme en tus ojos no me lo permitió. El temor de lo que pudieras ver y hacerme ver solo en segundos me paralizo.
Siempre sentí que podías verme. Siempre logre verme en tus ojos. Creo que supiste ver como mis ojos iban turbándose, como enterraba pedacitos de mí, cada segundo del día.
Hoy después de tantos años sin verme en ellos, moría de ganas de verlos. De verte a ti con mis ojos otra vez. De que me vieras. Sé que a diferencia de aquella vez que te vi, cobardemente por que no me deje ver, estarías contento de verme otra vez. Podrías ver con tus ojos transparentes la transparencia de los míos una vez más. Podrías ver que no estaban ya nublados. No llegaste con tus ojos amigos, pero pienso buscarlos. Ya es hora que me veas, que me vean, que me vea, que te vea. Ya es hora, yo quiero verte.
Un beso grande y un abrazo anticipado.